Caracterìsticas de una persona altruista

Una persona altruista antepone las necesidades de los demás a las suyas propias, a las que conceden menos importancia. Lo que le da sentido a sus vidas es entregarse a los demás, llegando incluso a renunciar a lo personal con tal de hacer algo por alguien.

No buscan que les gratifiquen, simplemente les satisface dirigir sus esfuerzos a mejorar la vida de los demás, pero les molesta que la gente ignore sus esfuerzos o que no los valore.

Si reciben una atención diferente se sienten incómodos pero al mismo tiempo les alaga. Las siguientes características que definen al tipo altruista pero que al mismo tiempo son caracteristicas de una personalidad autodestructiva:

  • Son personas que están atentas a los requisitos de los demás, intentando satisfacerlas sin necesidad de que el otro se lo pida.
  • No son competitivos ni ambiciosos.
  • Se desviven por estar al servicio de los demás; son personas muy consideradas en el trato con los otros.
  • Son tolerantes con los demás y nunca critican ni juzgan con crueldad.
  • No les gusta ser el centro de atención.
  • Tienen mucha paciencia y gran tolerancia a la incomodidad.
  • No son irónicos ni pedantes.
  • Son éticos, honrados y dignos de confianza.
  • Son ingenuos, inocentes y sufridores.
  • No sospechan que haya segundas intenciones en las personas a quienes se entregan.

Cuando la personalidad autodestructiva es acentuada en una persona altruista, por lo general, no se dan cuenta de que, a veces, el otro no necesita ayuda. Su constante ofrecimiento puede molestar a los demás. Estos individuos, por sus características, son buenos para dar placer, no para recibirlo. Emocionalmente se sienten bien cuando se dan a los demás. La intimidad es el único lugar donde estos sujetos experimentan placeres y les es fácil relajarse y gratificarse, ya que en presencia de otros automáticamente sacrifican sus necesidades.

Al autodestructivo le cuesta expresar su enfado con las personas queridas, por lo que proyecta una imagen de persona sufridora. Perciben el mundo como un lugar duro e injusto, por lo que son propensos a la depresión y a la tristeza. A pesar de esto son sujetos duros, capaces de asumir las cargas ajenas además de las suyas propias.

El problema que presentan las personas altruistas es que corren el riesgo de buscar un compañero que se aproveche o abuse de la buena disposición de estas personas.

Referencia: Caballo. Vicente E. “Manual de trastornos de la personalidad” Editorial Síntesis. Madrid, España. 2010. Pág. 272