Siempre he pensado que cuando se tiene una relación sentimental de noviazgo que está bien fortalecida da indicios a un posible matrimonio, y ninguna persona enamorada se casaría pensando que algún día se divorciara. Sin embargo, también es necesario saber que las relaciones matrimoniales no funcionan del todo y con el tiempo la confianza y el amor se van perdiendo, derrumbando así un matrimonio.
En terapia, me ha tocado que atender a niños que se enfrentan ante un divorcio y para mí no es nada sencillo atender estas situaciones, aunque me encante trabajar en terapia con niños no es sencillo porque cada caso es diferente. Me encantaría poder explicar alguno de los casos clínicos de divorcio que he tenido pero este no es el tema del día, así que en otra ocasión explicare la situación del caso, en esta ocasión solamente explicare los síntomas que considero más recurrentes que se dan previo a un divorcio, así que empezare:
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Tener un matrimonio forzado
Existen personas (hombres y mujeres) que buscan de alguna manera “amarrar” al hombre o mujer con una mentira o bien con un embarazo. Lo lamentable de esta situación es que existe un 80% de probabilidades de que esta relación no funcione y terminen separándose.
Cuando no existen hijos de por medio, no es tan difícil ya que entre ambos se llega a un acuerdo y listo. Pero cuando existen hijos la situación se vuelve muy dolorosa para los hijos.
El primer síntoma de un divorcio entonces se da cuando uno de los dos se casa por conveniencia o por necesidad y las consecuencias se reflejaran al pasar el tiempo.
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Mala comunicación entre pareja
Como seres humanos tenemos una tendencia de decir lo que pensamos… pero a veces no pensamos lo que decimos y eso tiene graves consecuencias. En el marco matrimonial no se puede guardar todo lo que se siente, el verdadero problema no es expresar los sentimientos sino la manera en que se expresan.
Una buena comunicación en pareja consiste en que se digan entre sí todo aquello que sienten sin generar molestia en el otro, el tono de voz es relevante ya que cuando uno de los dos levanta la voz demasiado pretende doblegar al otro y este solamente es el inicio de una mala comunicación en la pareja que puede marcar el camino hacia un divorcio.
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Evita las discusiones innecesarias
Las mujeres tienden a recordar todo. Y cuando digo todo, es que ellas pueden hacerte ver algo que hiciste en el año 2,000 traerlo al presente 2014 y hacer de ello un Apocalipsis.
Por supuesto que esta actitud es muy infantil, pero las mujeres la utilizan como táctica para llamar la atención o sencillamente porque quieren tener una discusión innecesaria. Sin embargo, estas conductas pueden cansar a tu pareja y piense seriamente en dejarte.
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Evita los celos
Por las redes sociales todos los días se ven mensajes que dicen: “Si no te cela, no te ama” “Las celosas aman más” y algunos mensajes similares. Pero nadie nunca ha dicho que los celos pueden ser síntomas de un posible divorcio, eso solo lo puede decir alguien que ha visto matrimonios destruidos a causa del divorcio y como en mi caso, lo he visto, tengo la solvencia de decirles apreciables lectores: “Los celos pueden ser síntomas que tu matrimonio este destruyéndose”
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Ser egoísta
El egoísmo puede manifestarse de muchas maneras, desde pensar solamente en sí mismo y ver a tu familia como una carga, culpar a la otra persona de las dificultades en la relación, hasta pensar en que darle un obsequio a tu esposa es algo innecesario.
En realidad existen más síntomas, sí solo toque estos 5 es porque estos son los que en terapia han sido recurrentes para mí.
El matrimonio no es un juguete o deporte del que sí nos aburrimos lo dejamos. Más bien es un acto voluntario de amor, entrega y sacrifico que está sujeto a la madurez de ambos. Así que, sí tienes un matrimonio y crees que tienen algunos de los síntomas descritos anteriormente, te invito a que reflexiones a lo que te llevó a casarte y tomes la mejor decisión, tanto por la salud mental de tu familia y la tuya.