Procesos psicomotores
Los procesos psicomotores constituyen las primeras adquisiciones del desarrollo infantil y nadie se atrevería a negar la importancia de los factores sensomotores en las primeras fases de dicho desarrollo. Los procesos motores y perceptivos constituyeron, durante muchos años, la base explicativa de las dificultades de aprendizaje; de manera que hablar de ella implicaba inmediatamente hablar de modelos perceptomotores.
Hoy en día, dichos modelos han sido prácticamente relegados a un muy segundo plano en gran parte de la bibliografía especializada. En nuestra opinión, la aparición de modelos psicolingüísticos y cognitivos ha venido a desplazar de forma tal vez excesivamente radical los antiguos modelos explicativos. Pero más allá de su mayor o menor arrinconamiento, lo que resulta evidente es que ya no están de moda.
¿Tienen sentido los modelos perceptomotores?
En los últimos 20 años se ha disminuido de forma impresionante la investigación en relación a las variables perceptomotoras y su incidencia en las dificultades de aprendizaje debido a los nuevos descubrimientos de la psicología cognitiva y por la desproporcionada anulación de los modelos explicativos anteriores a pesar de ello, no podemos olvidar que, en las primeras fases del desarrollo, el conocimiento constituye una acción sobre los objetos, y la mayor parte de los mecanismos cognitivos se basan de modo predominante en la actividad motriz; aunque debamos apostillar esta idea, no exclusivamente en la actividad motriz, sino preferentemente en ella, ya que tampoco se pueden olvidar las investigaciones relacionadas a la misma, por ejemplo: “la percepción lingüística en niños pequeños”.
¿Cómo funciona el aprendizaje psicomotor y perceptivo?
Para explicar esto lo hare a través del ejemplo siguiente:
Cuando un conductor es inexperto o está empezando a aprender a manejar debe tener sus cinco sentidos puestos en lo que está realizando; mientras desembraga, pone la marcha, acelera y va soltando el pedal del embrague con cuidado para que el motor no se apague, es prácticamente imposible que esté pensando en otra cosa o manteniendo una conversación con su acompañante sobre lo cara que está la vida. Su dificultad viene de que no ha automatizado suficientemente las acciones motoras como para poder dedicar atención a otras actividades mentales superiores. Cuando haya conseguido dominar estos procesos sensomotores básicos llegara a olvidarse de ellos y tendrá capacidad para prestar atención a otras cuestiones como, por ejemplo, estar más atento al tráfico que le rodea.
En términos fisiológicos Luria nos diría que cuando la actividad motriz puede apoyarse en niveles subcorticales (al automatizarse), los superiores pueden dedicarse a otros procesos. Es lo mismo que le ocurre al conductor novel en comparación al experto.
Tratamiento y evaluación de dificultades del aprendizaje perceptivo motrices
Dentro de los puntos a tratar y evaluar de estas dificultades de aprendizaje destacan:
• Discriminación visual
• La orientación y estructuración del espacio
• El tiempo
• Coordinación oculomotriz
• Estabilidad ocular
• Problemas posturales
Estas características no deben equivaler a decir que la existencia de problemas en alguna de estas habilidades conlleva necesariamente al fracaso en los aprendizajes académicos.
¿Cómo sé que un niño tiene problemas psicomotrices?
La conducta diaria en el ámbito escolar puede ayudarnos a ver estos síntomas que puede ser los siguientes:
• Manifiesta conductas de torpeza general.
• Presenta conductas motoras repetitivas.
• Tiene dificultades para saltar, botar un balón, etc.
• Presenta rigidez en los movimientos tanto generales como de los brazos o piernas.
• Presenta una actitud excesivamente relajada y con movimientos muy lentos.
• Tiene dificultades en cuanto a la habilidad manual (recortar, colorear). Los objetos le caen de las manos o los rompe con facilidad.
• Tiene poca fuerza en las manos.
• Tiene tics.
• Ha tenido un reconocimiento tardío de las partes del cuerpo al nombrarlas, reconocerlas o presentarlas.
Los niños que presentan estas conductas a simple vista pueden tener problemas en el área motora, ya sea en relación con el tono muscular, a la motricidad gruesa o fina, a la coordinación de movimientos o en cualquiera del resto de componentes de esta área funcional del desarrollo.
Otras características a evaluar:
• Nociones espaciales
• Noción espacial en el plano
• Organización espacial
• Conceptos temporales básicos
• Temporalidad y comprensión de acontecimientos y datos
• Temporalidad y ritmo
• Discriminación perceptiva
• Integración perceptiva o habilidad de cierre
• Coordinación visomotora
• Percepción intersensorial y transmodal
Por último, a los alumnos que tienen dificultades en el área motora, nunca se les debe forzar a realizar actividades físicas. Lo único que conseguiremos es que cada vez disminuya más la motivación no sólo respecto a dichas actividades sino también en relación con el conjunto de actividades escolares.
Es importante cuidar mucho el lenguaje. Nunca etiquetar a estos alumnos de torpes, ni utilizar frases como “todo lo rompes”, “Siempre te caes”, etc. Hasta aquí, el tema de Procesos psicomotores y perceptivos que es un tema muy complejo que seguiré explicando en otra ocasión. Hasta entonces.
Referencia
Carratala, Eduardo Rigo. “Las dificultades del aprendizaje escolar” los procesos básicos para el aprendizaje. Ediciones Ars Médica. Madrid, España. 2010. Págs. 278.