Todos los psicólogos comenten errores. Es absolutamente normal ya que todos aquellos psicólogos inexpertos al inicio de su ejercicio profesional son más propensos a equivocarse.
Los errores son parte del aprendizaje y nos ayudan a mejorar nuestra visión más allá del proceso terapéutico, a tal punto de lograr predecir de manera hipotética los cambios que puede proporcionar un plan de tratamiento en los pacientes.
Por supuesto que para llegar a tal punto se comenterán errores, por ello te traigo los 5 errores más frecuentes del terapeuta durante la terapia.
Errores más frecuentes al hacer terapia
Ignorar metas
Uno de los errores más frecuentes al hacer terapia es ignorar aquello que perseguimos en terapia. Es decir, nuestras metas y objetivos a corto, mediano y largo plazo. En dado caso que si llevemos esto al pie de la letra pero no produce cambio alguno, la terapia puede verse como un callejón sin salida.
- Olvidar las metas del paciente por perseguir únicamente las del terapeuta es uno de los errores más frecuentes.
- Otro error es comenzar la entrevista con metas difusas
- Perder de vista las metas de la terapia altera el proceso terapéutico.
Soluciones:
- Especificar las metas del cliente de forma conductual
- Especificar la estrategia de la terapia por etapas
- Trazar en el comienzo del tratamiento una línea base del síntoma.
Seguir con un plan que no da resultados
En lo personal, siempre me ha gustado ver resultados de mi trabajo como terapeuta. Pero no por eso quiere decir que en algunos casos no he logrado observar resultados favorables o esperados.
El plan terapéutico puede brindar resultados tanto positivos como negativos. Pero es un claro error seguir previamente con un tratamiento que no ha dado resultado alguno en los pacientes; por ejemplo:
- Repetir las técnicas en un paciente que otros terapeutas utilizan y que no han sido eficaces.
- Repetir lo que el paciente ha venido haciendo y que no ha producido resultados esperados.
Solución:
- Como terapeutas debemos cuestionarnos acerca del resultado de nuestro trabajo, si los resultados no son los esperados, algo estamos haciendo mal. No se trata solo del paciente, se trata de nuestro trabajo profesional. Por lo tanto, es necesario cuestionarnos acerca de la evaluación realizada y después de las técnicas utilizadas para conocer por qué la terapia no genera resultados satisfactorios.
- Es vital imprimir un cambio de dirección a la terapia cuando los resultados no son satisfactorios.
- Rediseñar el plan de tratamiento y hacer observaciones en base a los puntos que no generan buenos resultados.
- Dejar de acusar al paciente de mala voluntad o de resistencias.
Ignorar la información del paciente
Toda información que el paciente nos brinda es una información pertinente para el proceso terapéutico. Por lo tanto, el terapeuta no puede ignorar la información que el paciente proporciona sobre lo adecuado de las técnicas del terapeuta y el plan de tratamiento.
Solución:
- Evaluar el cambio con respecto a la línea base obtenida al comienzo del tratamiento
- No deben reiterarse técnicas que no producen cambios positivos
Insistir en una patología
En ocasiones el terapeuta tienda a pensar insistentemente que una patología ”x” es la que afecta al paciente, y en muchas ocasiones aquí es donde el terapeuta comete los errores siguientes:
- Ignorar aquellas conductas, palabras y actitudes que son susceptibles de utilizarse para amplificar los procesos de solución de problemas.
- Perseverar en la utilización de observaciones y preguntas que claramente son inútiles.
- Adoptar una actitud de búsqueda de resistencias.
Solución:
- Centrar la entrevista en la manera en que el paciente sea capaz de manejar sus síntomas.
- Centrar la entrevista en los recursos del paciente.
Olvidar las soluciones simples
Existen terapeutas que tratan a toda costa de “ser originales” y brindan una serie de tratamientos muy extensos o sofisticados, eso está bien. Sin embargo, este puede ser un error muy grave porque existen pacientes que solo necesitan una solución simple, en vez de un tratamiento sofisticado. Por lo mismo es necesario tener un buen ojo clínico para conocer este tipo de situaciones.
Solución:
- Empezar a utilizar las soluciones más simples para mejorar el tratamiento del paciente.
Hasta aquí con los 5 errores más frecuentes al hacer terapia. Es seguro que existan errores que aquí no mencione pero considero que estos son los más comunes.
Referencia: Navarro Góngora, José. “Técnicas y programas en terapia familiar” 1era. Edición. Editorial Paidós Ibérica, S.A. Buenos Aires, Argentina. 1998. Pág. 165