TEA – Intervención temprana en niños autistas

Sinopsis:
El TEA (trastorno del espectro autista) se presenta en niños desde temprana edad. Según estudios el desarrollo del TEA empieza a partir de los 3 años de edad.

A partir de los 3 años se puede observar las dificultades que tienen estos niños en la comunicación y la interacción social. La mayoría de los niños con TEA presentan un síntoma muy común que es el de repetir aquello que escucha, es decir que si le hacemos preguntas en vez de responder de manera estructurada él niño con TEA repetirá aquello que escucho del otro.

Desarrollo:
El patrón de conductas repetitivas es un síntoma que puede ayudar a diagnosticar desde temprana edad el TEA y por consecuencia implementar programas y/o herramientas que ayuden al niño a desarrollar las habilidades sociales y de comunicación. Aunque es importante mencionar que la intervención temprana debe de ser motivada por los padres de familia. Por lo tanto es importante incluir a los padres de familia en los programas que se trabajen con niños con TEA.

Intervención temprana del TEA

Uno de los objetivos primordiales de la intervención temprana del TEA es que los padres se complementen con el niño para trabajar juntos. De manera que los padres y terapeutas se convierten en moderadores para hacer más efectivo el tratamiento.

En una investigación acerca de la intervención temprana del TEA realizaron una serie de intervenciones terapéuticas con padres de niños con TEA y los incluyeron en el tratamiento como casos experimentales. Los participantes de la investigación fueron padres de niños con TEA de diferentes países como (USA, UK, Australia, Canadá, Tailandia y China) en la que reclutaron un total de 919 niños con TEA.

De esta investigación se realizaron 17 estudios diferentes pero al final se incluyeron solamente 10 estudios para meta análisis. Uno de los estudios más grandes fue el que incluyó a 316 niños.

En los resultados globales no se logró encontrar diferencias significas en los 10 estudios diferentes que podrían dar mayor avance en la intervención temprana de niños con TEA. Sin embargo los padres evaluados manifestaron una mejoría en el lenguaje, la comunicación y la interacción social de su hijo con TEA.

También la interacción entre padre-hijo mejoro, lo que sugiere que la intervención temprana de niños con TEA logra mejorar sus patrones de conducta.

En conclusión, la intervención temprana de niños con TEA resultan ser confortadoras ya que logran mejorar las interacciones de estos niños y mejoran las relaciones familiares y sociales del mismo.

Ahora bien, el tipo de intervención temprana dependerá de cada niño, ya que el tipo de tratamiento se adecua al niño y no el niño al tratamiento. Por lo tanto, la intervención temprana del TEA es a nivel individual y no en grupos colectivos ya que cada niño con TEA es diferente uno del otro.