Historia de la Psicología de la Educación

Las primeras interrogantes con la psicología de la educación aparecen en los comienzos de la filosofía griega, a partir de los planteamientos de Aristóteles y Platón. Estos autores abordaron temas de tanta trascendencia como los fines de la educación, la naturaleza del aprendizaje o la relación profesor-alumno. Ya en su filosofía se adivinan muchos de los elementos de lo que más tarde será la psicología de las facultades o la misma psicología
cognitiva.

Psicología de la Educación

Asimismo, los más calificados representantes de la filosofía moderna han influido en el corpus de la psicología de la educación. De manera especial se han hecho presentes Descartes, al defender el protagonismo de las ideas innatas como base del conocimiento, y Locke que apela, por el contrario, a las impresiones sensoriales, es decir, a la experiencia

En el siglo XVI, por otra parte, aparecen libros de educación en que se enfatiza la forma de hacer más efectiva la enseñanza a través de conceptos psicológicos. Entre ellos destaca Juan Vives en el año 1492-1540 así como Glover y Ronning en el año 1987 quienes señalan la importancia de los procesos de percepción y memoria en el proceso educativo.

Luego en los siglos XVIII y XIX aparecen otras dos figuras relevantes, quienes hicieron aportes en la reformulación del sistema de enseñanza, estos son Pestalozzi y Herbart. Johann Pestalozzi en el año 1745, influido por Rousseau, fundó numerosas escuelas, especialmente orientadas hacia los más pobres e imprimió un rumbo nuevo a la función de la educación como un proceso orientado hacia el niño como ente individual y especial en sí mismo. Le preocupaba que los niños estuviesen siendo socializados para el trabajo, siendo que según su parecer las escuelas debiesen estar “formando personas”, cuyo conocimiento estuviese orientado por estándares morales. Es así que enfatizó el aprendizaje por observación y el aprendizaje experiencial, minimizando, consiguientemente, el aprendizaje memorístico, lo que resultó revolucionario para su época. Pestalozzi reconoció la importancia del desarrollo moral y de la relación entre profesores y alumnos como aspectos críticos de la educación del niño.

Johann Herbart en el año 1776, filósofo, psicólogo y pedagogo alemán, por su parte, influido por Kant, plantea que el aprendizaje se potencia a través del interés, el cual surge por autogeneración en el alumno y por intervención del profesor. Su teoría de la percepción y de la masa(¿) perceptiva se convirtió en el paradigma educativo del siglo XIX, renovando profundamente la metodología educativa al sugerir que dentro del proceso instruccional deben presentarse los conocimientos nuevos de tal manera que sean asimilados y lleguen a formar parte del contenido mental. Estas ideas tuvieron un amplio eco en los círculos pedagógicos y parecen resonar todavía hoy en las teorías de autores bien recientes, como el aprendizaje significativo de Ausubel o las corrientes psicológicas que apelan a la noción de esquema.

Pese a las influencias de estos autores, los especialistas consideran que no fue hasta el siglo pasado, en el período que va de 1880 a 1900, que se marca el comienzo de la Psicología de la Educación, dadas las aportaciones decisivas que se producen por parte de una serie de autores cualificados que contribuyeron decisivamente al nacimiento de esta disciplina.