La familia se ubica dentro del sistema socio-económico de la sociedad y es considerada un grupo de personas relacionadas por la herencia; este grupo se distingue fácilmente porque tiene padres, hijos y sus descendientes. Aunque también pueden entrar los vínculos y las relaciones de parentesco, así como los roles que se desempeñan.
Algunos expertos aseguran que la familia es la base de la sociedad, sin embargo pienso que la familia no solamente es la base, sino el eje dinámico de la misma y cambia constantemente, esto explica el porqué el hombre evoluciona constantemente.
En el proceso de socialización, la familia tiene un rol trascendental ya que no sólo transmite valores propios de la cultura donde se desarrolla, sino que también sirve para determinar los lineamientos que permiten interacción cotidiana de los miembros dentro de la sociedad.
De la misma manera dentro de ella es necesario que se cumpla con los requisitos mínimos de cuidado y atención, que permitan la satisfacción de las necesidades físicas, biológicas, afectivas y materiales de sus integrantes.
Los 25 tipos de familia
La familia debe de administrar cuidado y el apoyo a sus miembros, ofreciéndoles un ambiente adecuado para desarrollar una personalidad sana, así como los roles asignados dentro de este núcleo o los papeles esperados socialmente.
Finalmente, la familia parte de un grupo social mayor, y está inmersa en un campo muy amplio de influencias culturales, tales como el carácter de diversas organizaciones complejas, cambios históricos y conflictos de valores debidos a diferentes étnicas, religiones y clases sociales; a pesar de esto, de uno u otra manera ha logrado existir a lo largo de la historia y todo evento humano es parte intrínseca de esa historia y evolución.
En el mundo, en un país, en una comunidad y en una aldea, existen una diversidad de familias, cada cual con características sea culturales, étnicas y/o religiosas, a continuación desarrollare solo 25 tipos de familia que es el resultado de diversas investigaciones realizadas por psicólogos y psiquiatras en Latinoamérica.
Familia de tres generaciones
En este tipo de familia existe una organización de apoyo: es decir, los abuelos siguen ayudando a la economía familiar, también existe una cooperación en las tareas familiares, con esto, ellos se tienden a sentir importantes, en caso contrario se sentirán rechazados e inútiles.
El niño no entiende quien tiene poder, pues está inmerso en un ambiente de continuos choques de poder entre padres y abuelos. El niño se convierte en aliados de uno de los dos lados (padres y/o abuelos), según el que más le convenga a sus necesidades. No existen las fronteras establecidas, como la familia nuclear.
Aunque los roles de poder generan problemas, pues el abuelo interfiere en los problemas de aprendizaje, pues existe una ruptura de normas. La función parental es todo.
No hay normas y reglas totalmente establecidas para el niño. Estas acciones hacen que el niño se convierta en un niño manipulador porque cuando logra conocer que los roles de poder pueden ser manipulados, él también quiere tenerlo.
Familia de soporte
En este tipo de familia, se delega autoridad de los hijos mayores. La madre se desgasta, pues ella nunca puede ser la misma. Se delega autoridad a los hijos más grandes, para que cuiden a los hermanos más pequeños. Por lo tanto, los hijos mayores asumen una responsabilidad en la que no están preparados.
Cuando esto sucede, se promueven habilidades ejecutivas, con esto, el niño se siente excluido de los demás hermanos, ya que es en los hermanos mayores en quienes se centra el poder.
Lo único que el niño necesita es ser cuidado, es sentir la ternura de sus padres, pero las actitudes de los padres bloquean esta necesidad, esto hace que se creen psicopatologías de adolescentes.
Familia acordeón
Uno de los padres permanece alejado de la familia, por periodos largos la encargada de la familia es la madre, aunque no se le observa como proveedor económico, ella tiene la carga económica del hogar y los hijos.
El padre que queda en el hogar, asume la responsabilidad del que se va. Este padre engrandece los problemas, cuando esté atracado de la situación, dirigirá la cólera contra los hijos, cuando uno de los padres se va, quedó un sentido de abandono y desprotección.
El hijo mayor es el encargado de proteger, de cuidar la casa y quién los padres se cercioran de que no encuentre pretendiente. Los niños facilitan la separación de los padres, pero cuando el padre regresa, no lo ven como un intruso, le hacen creer que se va de la casa por su propio bien.
Los hijos aprenden a que es mejor que el padre esté fuera de casa y comparan: padre bueno y madre mala, se acentúa divorcio y este se justifica porque el padre no regresa, lo que hace que los niños se repriman. Cada vez que el padre se va, el niño lo experimenta como la muerte del padre, pues el niño experimenta la muerte de algo de su interior, muere una parte del su yo.
Familias cambiantes
Este tipo de familia se cambia constantemente de domicilio, esto es un fastidio para la construcción de la personalidad de los hijos, pues no se puede afianzar ni construir el Yo, se hace necesario por lo menos pasar 21 años en el mismo domicilio, para que pueda experimentar la intimidad familiar y de su dormitorio.
Los hijos de este tipo de familia experimentan pérdida de sistemas de apoyo, familiares o comunitarios, como consecuencia la familia queda aislada, ya no hace amigos, ni vínculos.
El niño puede presentar disfuncionalidades escolares y sociales. Cada cambio de domicilio, implica crisis para el niño. Como consecuencia la personalidad del niño es inestable. El niño puede ser reactivo o poco reactivo, agresivo, impulsivo, enojado, rebelde o apático.
Familias huéspedes
En este tipo de Familia, el niño llega una familia temporalmente, es decir que llega como huésped. No existe apego de parte del niño ya que lo hace sentirá una pérdida emocional cuando deba de regresar de donde vino. Es importante resaltar que cuando el niño llega tiene un período de adaptación o de desestabilización emocional.
La familia en donde entra el niño, tiene sus problemas, por lo tanto, la familia entra en crisis ante el huésped, cuando esto sucede el niño piensa que llega a usurpar algún lugar, esto sucede cuando el cónyuge no acepta al niño, pero cuando lo acepta, le da un trato especial, por lo que la pareja e hijos tienen celos del huésped, pero el huésped tiene ganancias secundarias, porque maneja al cónyuge que lo aceptó.
Si los dos cónyuges lo aceptan, se crea crisis y problemas con los demás hermanos.
Ahora bien, si el niño cambia constantemente de familia no llega a establecer vínculos emocionales duraderos y profundos de por vida.
Familia del niño con madrastra o padrastro
En esta familia posiblemente existió divorció. Sin embargo él o ella pueden volverse a casar o unir, pero si el niño tiene más de cuatro o más de 21 años, se produce un choque increíble. Esta nueva relación hará que toda la familia pase por un proceso integrador, por un compromiso pleno de igualdad para todos o posición periférica, que debe ser decidida antes que se casen.
Los hijos lograran una demanda del padre natural. El padre natural, sufre de conflictos de lealtades, esto cuando no hay roles claros.
El niño puede sufrir la crisis de los puntos rebelión, conducta opositora, desadaptación social y en la escuela, etc. El niño tiende a hacer alianzas momentáneas y convenientes:
- Niño-nuevos hermanos.
- Niño-hermano específico.
- Niño-padre natural.
- Niño o niña-madrastra o padrastro según su conveniencia.
Cuando existe una mamá con múltiples parejas ocasiona en el hijo trastorno de ansiedad y depresiones leves.
Familias con un fantasma
Este tipo de Familia, Ha sufrido muerte, deserción de uno de sus miembros o con un duelo mayor de tres meses, esto causa enojo en uno de los miembros de la familia y lo repetirá porque siente culpabilidad. A pesar de esto, si asume la función de la persona faltante pueden sentirlo como deslealtad a su memoria (particularmente esto sucede en un Duelo no resuelto).
El niño sufre desestabilización familiar y social en sus emociones y recuerdos. Con el primer duelo de la madre el niño se pone triste cuando el padre está cerca aunque él ya lo haya “superado”.
Familias descontroladas
En este tipo de familia, un miembro sufre un acting-out y cree que por medio de la violencia se puede ejercer el respeto. El niño preescolar es un monstruo que no acepta las reglas. Cuando se sale de sus casillas el niño siente que va a explotar por sus ojos y su cuello.
Todo el enojo lo desplaza hacia objetos y/o hermanos/ padres. El niño hace una alianza con uno de los padres o con otro hermano (el niño problema), o puede también hacer alianza con otro padre, siempre y cuando le convenga. No se respetan las reglas en el hogar, los padres se descalifican entre sí, no hay coherencia entre las reglas y las actitudes de la familia, el niño se siente maltratado por eso busca una alianza. Hay carencia de afecto y comunicación.
Los padres se mantienen en conflicto ya que quieren tener control sobre uno de sus hijos, sin embargo la dinámica familiar no ayuda a que los hijos respeten a los padres.
Familia tradicional
Para describir este tipo de familia, es necesario considerar las variaciones culturales de cada contexto. Este tipo de familias se adapta a las circunstancias cambiantes. Esta acomodación le permite mantener una continuidad y desenvolver un crecimiento psicosocial en cada miembro.
Dentro de su dinámica, se presenta al padre como un individuo maduro y masculino que acepta el papel de padre y se siente cómodo con él. Respeta su esposa y fundó un hogar adecuado en el cual forma una familia. Por otro lado, la madre es una persona femenina que acepta y satisface sus funciones como esposa y madre. Respeta su esposo, así como este la respeta a ella. Cada uno de ellos depende del otro, pero cada cual conserva cierto grado de independencia.
No existe un padre especialmente autoritario y ninguno es particularmente pasivo. Son dos individuos adultos que representan un clima consistentemente firme y también un enfoque positivo cariñoso. A pesar de que ocurren discrepancias entre los padres, los niños y los padres saben que no reflejan una visión real disfuncional en la relación entre padre y la madre.
Por lo tanto los niños adquieren la noción de que la relación parental es sólida e indivisible. Esta familia podrá tener un hijo o varios, y ser acaudalada por escasos ingresos, pero sus rasgos importantes son que los padres están unidos por un fuerte vínculo y son capaces de proporcionar una administración parental segura y consistente a estos hijos.
Estos padres no educan a sus hijos ateniéndose a reglas, sino que son capaces de responder correctamente a cada situación en particular, y lo suficientemente flexibles para satisfacer las demandas de los hijos de ambos sexos y cualquier edad. Los padres maduros comprenden intuitivamente que el niño necesita afecto y amor, como también disciplina y ciertas limitaciones. Reconoce la necesidad de cierta conformidad en el niño y son capaces de proveer esta disciplina en un clima de aceptación positivo y real.
Familia de padre ausente
Esta familia es una especie de matriarcado donde la madre es casi la autoridad absoluta en el hogar, las decisiones concernientes a los niños las adopta ella y por lo menos ante estos, aparece como el oficial comandante porque es ella quien impone la mayoría de los castigos.
La madre aborrece su feminidad y el padre acepta a medias su papel masculino. Las responsabilidades de la madre son grandes y las cumple con una determinación un tanto sombría. Tiene poco de la pasividad femenina normal y en realidad su papel como madre o esposas no le agrada.
Critica frecuentemente al hombre de fracasado y lo empequeñece constantemente. De la misma manera, el padre considera que su papel ante los hijos es secundario y dedica gran parte de sus energías a su trabajo u otras actividades no concernientes a la familia.
Desarrolla la sensación de que él no es más importante en el hogar y delega a su esposa la mayoría de los asuntos relacionados con la casa y con los niños. El clima emocional de la familia hace que los niños esperen que su madre adopte todas las decisiones importantes y sea la figura autoritaria y predominante.
Familia agotada
Es una familia donde ambos padres viven intensamente ocupados en actividades de afuera, a pesar de que sus finanzas son productivas, dejan el hogar emocionalmente estéril. Raras veces puede ocurrir que los padres conserven un hogar emocionalmente sano; si bien la calidad de la relación entre los progenitores y los demás niños es más importante que la cantidad, cuando ambos padres trabajan, muchas veces queda poco tiempo o energías para dedicarles a sus hijos.
Con frecuencia los padres trabajan para adquirir más lujos, otro automóvil, un televisor más grande o alguna otra comunidad regido por estas ganancias materiales. Raras veces contribuyen a favorecer el desarrollo emocional de los hijos, a los cuales abandona en la compañía de otros adultos, quienes no presentan interés emocional en su formación.
Los padres se cansan, viven agotados e irritables, y eventualmente empiezan a demandar a los niños la misma sombría dedicación al trabajo que ellos mismos tienen.
Familia Hiperemotiva
Este tipo de familia presenta una gama de expresión emotiva más amplias de lo común. La híper emoción es un tipo de ajuste inmaduro en ciertos segmentos de la sociedad. Cuando el niño o el adulto permanece en un medio compuesto por individuos similares, su ajuste perecerá adecuado, pero cuando los niños establecen contacto con otras personas cuyos antecedentes son más maduros y no reflejan estas turbulencias emocionales, no se podrán ajustar cómodamente.
En su dinámica, todos, padres y niños por igual, dan rienda suelta a sus emociones en mayor medida de lo común. Si los padres enfurecen entre ellos, expresan abiertamente sus resentimientos con sonoros insultos. Todos los sentimientos expresan libre y excesivamente, inclusive el amor, la depresión, la excitación y la ira. Los niños nacidos en una familia así, aprenden a poco tiempo a gritar para hacerse oír, presencian violentas discusiones entre los padres y en ocasiones hasta fuertes golpes.
En consecuencia, copian este comportamiento y en la juventud no están preparados para tratar con personas ajenas a su situación hogareña, ya que son emocionalmente volubles según las normas del mundo externo.
Familia ignorante
La familia ignorante es aquella donde ambos padres, por uno u otro motivo, carecen de conocimientos generales sobre el mundo que los rodea. Ya sea por deficiencia mental o por otras razones, los adultos están cargados de prejuicios, son tendenciosos, tienen puntos de vista limitados y exponen a sus hijos o un concepto cerrado e individuo del mundo y de la gente que los rodea. En estos padres no siempre hay retardo mental ni un fondo educativo limitado, pero muchas veces intervienen ambos factores.
Estos padres inculcan a sus hijos ciertas verdades a medias o falsedades, que para los niños es difícil despojarse de estas concepciones erróneas. Los primeros maestros de todo niño son sus propios padres, y resulta sumamente difícil que cualquiera, sea un docente profesional u otro, traté de borrar posteriormente los errores conceptuales previos con limitaciones causadas por prejuicios involucrados con anterioridad.
Si en esta familia prevalece la mordida aceptación, es probable que los jóvenes posean suficiente flexibilidad como para ajustarse debidamente. En caso contrario, prevalecen sentimientos negativos, controversias y grandes inseguridades, los prejuicios y las actitudes inadecuadas de los niños serán más permanentes.
Familia serena e intelectual
En esta familia los padres son extraordinariamente híbridos en expresión de sus sentimientos y se distinguía actividades intelectuales. Tratan de fomentar la actividad intelectual en sus hijos, combaten activamente todos los pliegues normales de sentimientos, aunque ello atente contra sus propias actitudes. Muchas veces, este tipo de padres tienen mucha educación y cada cual se dedica su propio interés intelectual.
Familias ensambladas
Son aquellas familias compuestas por adultos divorciados y/o separados en los cuales tienen cabida los hijos menores o adolescentes de cada uno de ellos; los cuales vuelven armar una pareja como otra persona también separada en su misma situación con hijos y hasta nietos. Incluyen relaciones mucho más complejas que las tradicionales, puesto que lógicamente se presentara aquí la interacción de las personas, cada una de ellas con vidas pasadas diferentes.
Cuando dos personas vuelven a vivir en pareja, se puede afirmar que se estará comenzando recorrer un camino que muy posiblemente incluirá situaciones difíciles, especialmente en sus inicios. La llegada de un nuevo dejo a la familia ensamblada, podría unir a la familia, ya que el bebé será algo que todos tendrán en común.
Durante los primeros momentos, será muy importante que la disciplina y el orden de la casa serán aplicadas por el adulto que se encuentra presente en el momento, ya que es importante que los chicos sepan qué la autoridad continuará partiendo de los adultos, y no de los chicos. Para esto, será fundamental que los nuevos cónyuges acordes entre sí qué tipo de arreglos impondrán.
Los puntos de partida de esta familia son dos: la muerte de uno de los cónyuges, o el divorcio previo de uno o los dos cónyuges. En ambos casos constituyen pérdidas para resto de los hijos de las familias, de manera que la primera tarea será la de aprender a manejarse con las pérdidas y los cambios.
La familia de padres divorciados y separados
Familia en la que los padres se encuentran separados. Se niega a vivir juntos; no son pareja pero deben seguir cumpliendo su rol de padres ante los hijos por muy distantes que éstos encuentren. Por el bien de los hijos se niegan a la relación de pareja pero no a la paternidad y a la maternidad.
La familia extensa o con sanguínea
Se compone de más de una unidad nuclear, se extienden más allá de dos generaciones y está basada en los vínculos de sangre de una gran cantidad de personas, incluyendo los padres, niños, abuelos, tíos, tíos, sobrinos, primos y demás; por ejemplo, la familia de triple generación incluye los padres, a sus hijos casados o solteros, a los hijos políticos y a los nietos en una misma casa.
La familia de madre soltera o padre soltero
Familia en la que solo nos encontramos con uno de los padres, generalmente la madre, que asume la crianza de los hijos.
Uno de los progenitores no se distancia de la familia y no reconoce la paternidad o maternidad del bebé por diversos motivos.
En este tipo de familia se debe tener presente las distinciones pues no es lo mismo ser padre o madre soltera adolescente, joven o adulta.
Familia nuclear
En este tipo de familia, la unidad familiar básica se compone de esposo, esposa e hijos. Éstos últimos pueden ser la descendencia biológica de la pareja o miembros adoptados por la familia.
Familia endogámica
Este modelo de familia es el de las tradicionales en el sentido de que miran con agrado lo que siempre han conocido y valorado como bueno, el modelo de familia de siempre, y vial relativamente añorado. Se trata de una familia donde las responsabilidades de unos y otros están claras y son asumidos sin dificultad, porque son previamente sabidas y reconocidas.
En concreto, los roles paternos y maternos están muy definidos al modo tradicional, pero sin actitudes sangrantes de la prepotencia del hombre sobre la mujer. Las relaciones de los padres e hijos son buenas, este tipo de familia, es una de las mejores de entre los 25 grupos que conforman nuestra tipología. Los padres aparecen con identidades fuertes, aunque también hay agnósticos y no creyentes por encima de la media, como opciones probablemente ya asentadas.
Los hijos consumen menos drogas, lo que no quiere decir que no los consuman. Este modelo de familia tiene el obstáculo de un enroscamiento excesivo en sí misma. Con una mirada básicamente preocupada hacia el exterior; exterior, que algún día los hijos tendrán que enfrentarse, ya fuera del nicho familiar, ellos tendrán la capacidad para transmitir los valores de los padres. La duda radica en si la transmisión de los valores, realizadas, en este caso, por reproducción de lo inculcado por sus padres se ha hecho propia, esto es, si ha pasado por la duda y la confrontación personal al modo como se realiza la socialización.
Familia conflictiva
En este tipo de familia, los miembros se llevan muy mal entre sí, las relaciones son muy conflictivas esto a causa del consumo de drogas, por cuestiones de orden sexual de los hijos, por la amistad de estos e incluso por las relaciones entre los hermanos.
Las relaciones de los padres con sus hijos son alejadas y la comunicación es muy escasa o mala. Presenta un universo de valores muy distante mayoritario en los hijos, existe una rigidez en sus propias concepciones de la familia, como la delimitación de status y roles paternos y subordinaciones relativamente ensuciados. Son padres nominalmente religiosos, algo menos formalmente definidos en sus valencias políticas, y con unos hijos que, éstos ya en mayor proporción, son claramente no religiosos y no tienen reparo en decirse de conservadurismos, incluso en mayor proporción que sus propios padres aunque no falten los que sitúan en los contrapuestos de sus padres. La mala comunicación, los conflictos pueden estar inmediatamente ocasionados por el comportamiento de los propios hijos ya que por lo general tienden a consumir drogas.
Familia nominal
Este tipo de familia, se caracteriza básicamente por lo que el río es, o por lo que es menos que los demás colectivos. Sólo hay un elemento en el que se destaca sobre los demás grupos, y consiste en el enfoque que los padres hacen sobre los valores importantes en la vida.
Esta opción tiene tres variantes:
- Es importante vivir al día del mañana
- Es importante invertir tiempo y dinero en estar guapo o guapa
- Es importante disponer de mucho tiempo libre y de ocio.
Este modelo presenta los rasgos de una familia cuya unión se considera importante, en la que los padres se sienten cohibidos para comunicar sus ideas y sus opiniones a los hijos, y en la que la manera de resolver las cosas no se adapta necesariamente a las circunstancias concretas del momento; por ejemplo, cuando hay algún conflicto inevitable.
Las opiniones de los hijos no son muy consideradas por sus padres; Esta familia destaca porque hay un menor grado de conflicto debido a las drogas, aunque no del alcohol; de los conflictos debidos a las relaciones de los hijos con sus amigos, razones usuales, etcétera. Los padres como los hijos sitúan a los amigos, con mucha mayor fuerza que los demás grupos, como espacio donde se dicen las cosas importantes para orientarse la vida, situando el menor grado de importancia, los libros, la escuela y de Iglesia.
Familia adaptativa
Se trata de una familia con buena comunicación entre los padres e hijos, con capacidad para transmitir opiniones y creencias, abierta al exterior; familia no exenta de conflictos, de desvanes ciencias, a veces graves, fruto básicamente de situaciones nuevas en los papeles de sus integrantes, mujer y hombre, madre y padre, padres e hijos, en este modelo las responsabilidades de cada uno están en revisión continua, y el trabajo con las acciones familiares, en tanto que familiares, no resulta evidentes y son objetos de tanteos y de incertidumbres.
Esta familia parece ser la familia de la negociación, de la búsqueda del acomodo, no llegando siempre y, menos aún a corto plazo, a los resultados deseados. Es en este modelo de familia donde la tasa de divorcio separaciones es más elevada. Pero, posiblemente, las que atraviesan con éxito la prueba de adaptación a la modernidad, permitirán las nuevas generaciones insertarse con mayores ganancias en la sociedad del futuro. Entre sus miembros de este tipo de familia, hay agnósticos, no creyentes y ateos por encima de la media, especialmente los hijos, pero también más padres católicos practicantes que en la media, dando los hijos los mismos valores de esa media global.
Familia psicosomática
Uno de los miembros está constantemente enfermo y utiliza la enfermedad para mantener la familia unida mediante los cuidados excesivos al enfermo.
Características
- La familia funciona óptimamente cuando alguien está enfermo.
- Existe sobreprotección hacia el niño que tiene el problema.
- Incapacidad de resolver conflictos.
- Hay una enorme necesidad de evitar conflictos.
- Se mantiene una enorme rigidez.
- Aparenta ser una familia normal ideal y buenos vecinos, cuenta sus problemas.
- El niño usa su reflejo como manipuleo y búsqueda de afecto.
Familia monoparental
Los orígenes de las familias monoparentales pueden ser diversos: el divorcio o la separación de la pareja, la viudedad y soltería, estando compuestas en la mayoría de los casos por grupos familiares por la madre y los hijos. Los problemas más comunes que se suele encontrar en este tipo de familias suelen ser: problemas económicos, de alardes por sentirse excesivamente cargado de responsabilidad del progenitor que está al frente, existen dificultades a la hora de poner ocupada a la familia, dificultades de emancipación de los hijos, problema de conductas en los hijos, etc.
Aunque sus problemas suelen verse con mayor frecuencia las familias monoparentales, no son exclusivos de ellas. Similar que estén sometidas a más estrés y menos apoyo, es necesario destacar que las familias con ambos padres enfrentados en peleas interminables o con padres ausentes pueden ser más problemáticas. La familia monoparental resulta más afectada por el entorno. Las actitudes y condiciones de la escuela, trabajo, sociedad repercuten con más intensidad dentro del hogar.
Los padres y madres tienen a desarrollar amistades que a la vez sociales que también son utilitarias. Los hijos suelen estar más enterrados de las condiciones de trabajo de su progenitor y reaccionan sobre el funcionamiento de la familia sobre la sensación del bienestar del mismo.
Asimismo, las tareas familiares se establecen en relación con las necesidades reales, y no preconcebidas: son tareas que realmente necesitan realizarse, en lugar de tareas asignadas, se dan otras para enseñarle al hijo como se hacen. Es un solo adulto el principal responsable de conservar un día a la familia, cuidar a sus miembros y mantener el orden, aunque en ocasiones se relacionen como compañeros.
Referencia:
Manual de psicopatología del niño / Ajuriaguerra J. De y D. Marcelli
Fundamentos de Psiquiatría Infantil / Stuart Finch