Sinopsis:
Hoy se cumplen 91 años del legado de Hermann Rorschach, un psiquiatra suizo que aún sigue siendo tan conocido por su trabajo desarrollado en el campo del psicodiagnostico, la psicometría y el psicoanálisis.
Su test más conocido es el mismo que lleva su apellido que es “El Test de Rorschach”. Rorschach nació en Suiza, en el seno de una familia con pocos recursos económicos. Su padre era un pintor sin gran éxito en su profesión y que daba clases de pintura en una escuela preparatoria para varones.
Rorschach mostró especial entusiasmo por entintar sobre papel y pegarlo, en sus experimentos obtenía formas de pájaros o mariposas, lo cual incluso le valió ser apodado con el nombre de “kleck” que significa “mancha”.
Desarrollo:
Iniciación en el psicoanálisis
Durante el año de 1,911 Rorschach empieza a estudiar psicoanálisis que era la corriente psicológica en auge durante el siglo XX. Al tiempo de estudiar realizo prácticas en la clínica universitaria de Zurich llamada “La Burghölzli”, dirigida por Eugen Bleuler.
En las prácticas quedo encantado con las ideas freudianas, así empezó a darle mayor importancia en el aspecto de la interpretación y el psicodiagnostico.
Cuando se trabajaba en un hospital de Suiza, tuvo tiempo para interesarse en la psicopatología de la religión. Durante ese momento, un colega publica en 1917 su tesis doctoral sobre una prueba de manchas que había estudiado, Hermann Rorschach renueva su interés en su técnica ya utilizada. De esta forma Hermann llega a manejar 40 tarjetas, aunque realmente eran 15 las usadas con una mayor frecuencia. Alcanzó entonces las respuestas de 305 personas a quienes mostraba las tarjetas y les preguntaba ¿qué podría ser esto? La prueba fue aplicada a 117 neuróticos y 118 psicóticos.
Las respuestas intrínsecas le prestaban las habilidades perceptuales, inteligencia y características emocionales del individuo. Rorschach mencionaba que esta prueba es como un espejo donde la mancha constituye un estímulo óptico, el cual activa imágenes que son proyectadas de vuelta a las manchas.
De esta manera el aplicador del test puede ver los rasgos más profundos de personalidad e impulsos de la persona a quien se le realiza la prueba. El manuscrito que contiene la versión original de las pruebas consiste en 15 tarjetas, pero seis editores las rechazaron, de tal manera que tuvo que reducir el número de tarjetas a diez.
Durante junio del año 1921 se imprimió su libro respecto al test de Rorschach pero la edición de las tarjetas fue insatisfactorio ya que redujeron el tamaño y los colores fueron alterados. Así quedó el modelo de las diez tarjetas que se conocen como la prueba de psicodiagnóstico de Rorschach.
Test de Rorschach
El Test de Rorschach es un método proyectivo, en donde la persona debe describir lo que ve en las diez láminas. Algunas de ellas son en blanco y negro y otras en color. La respuesta de cada una es calificada con base a la información que da el paciente, la cual puede incluir forma, color o contenido. La teoría dice que los símbolos que se proyectan sobre la prueba pertenecen tanto al código genético, como a los arquetipos, los cuales son activados por necesidades que se presentan en la vida del individuo. De esta manera los símbolos son frecuentemente factores que despiertan nuestra memoria en un nivel emocional, el cual es medido y codificado en la prueba. Por tal razón esta prueba es hoy en día, a pesar de su antigüedad, una de las más utilizadas.
Referencias
Encuentros con Jung. “Las filmaciones de Houston”, página 319. Edición de William McGuire & R.F.C. Hull. Editorial Trotta, 2000.